Relato de un día de verano
Era pronto, en la calle se escuchaba el sonido del silencio. El calor hacía que todas las personas que no estaban de vacaciones permanecieran en su casa refugiadas de las garras del sol.
Pero dos jovenes decidieron adentrarse a la aventura. Una campanada señalaria el momento en que se encontrarían justo en ese punto donde empieza todo, a donde van a parar todos los caminos. Una baldosa indicará el lugar, allí se encontraran por primera vez, serán como dos niños que pasan las noches leyendo El Principito, que iran a su destino por el camino de Oz y pasarán la tarde en el País de Nunca Jamás.
13 Comments:
Me encanta encontrar personas de esas que no quieren crecer.
Si vas a Nunca Jamás, saluda a Peter Pan... y si esperas un poco, quizás nos veamos por allí.
Nunca crezcas, pequeña ninfa.
Besotes
Lucas
Ninfoide...Al final has escrito un post nuevo, por lo que veo...Pues el anterior no estaba tan mal, la verdad. (Lo único que era un poco críptico, y un poco ambiguo, pero eso tampoco es nada raro en tu forma de escribir). Ya tengo varios post acumulados para que me los expliques (si quieres) cuando vayamos al Palacio de Oriente. Yo si pudiera me iría ahora mismo de excursión al País de Nunca Jamás. Un beso.
La segunda estrella a la derecha y todo recto hasta la mañana
¡Que no se nos olvide nunca el camino!
¿eso es una cita? ;)
En su día conocí a alguien al q yo le decía q tenía complejo de peter pan, precisamente por eso... por su manera de no querer crecer xDDddd jeejejej
Besitos
Ninfilla, ¿sabes cuánto te quiero?.
Me encanta tu lado volatil, siempre sabes arrancar una sonrisa y sobretodo, hacer dudar sobre si las lágrimas merecen la pena y hoy te digo... no, no merecían la pena.
Eres genial.
Millones de besos para todos los gustos.
Yo quiero ir a esa cita...
Quería hablaros de mis dos pies hoy. El izquierdo huele a una mezcla de Camembert y Emmental, y el derecho huele como un gato muerto. Tengo un problema con ellos que me está socabando la moral. Ya me puedo dar polvos o cremas, huelen como el diablo. En cambio los pedos me huelen como a morcilla fresca, coma lo que coma. Los amigos me llaman el chico de los olores. Esta noche estoy un poco ciego, y quiro ser sincero, aunque sé que luego me arrepentiré. La vida es así, y yo soy Kalgash, el gran kagador.
Ya que has bajado de la sierra digo yo que podrñias actualizar...Je, je, je. Un beso, Ninfoide.
Penquita te parecerá bonito chivarte de que ya estoy por aquí... pero además si aún que actualice tu ni te vas a enterar porque no estarás :P
Te contaré el fin de la historia digamos de mi "Amigo".
Resulta que dicen tambien que hay casualidades, y no todas son buenas. A veces el destino se pone en contra y te juega una mala pasada. Esa noche alguien a quien mi amigo acababa de conocer, (buena jente creo sin apenas conocerlo), se unió al grupo. Y justo en el momento mágico en que mi amigo se disponía a hablar con la chica, él se interpuso entre ambos, pura casualidad, se presentó, y empezó a hablar con ella, en ese momento mi amigo se retiró timidamente a un lado y le dejó hacer. Al cabo de un rato ella se marchó, y fin del cuento.(Mas o menos).
Perdón por lo de gente con "j" a veces se me van los dedos mas que la cabeza jeje
No hay nada como seguir siendo niñ@... No cambies
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