Desvanecer

El miedo ha vuelto y temo que no se marche.
En un día todo se ha desmoronado, esa sonrisa,ese espejo que siempre guardaba en su interior lo que necesitabas en cada momento... todo. Pensé que hace unas horas volvía a la normalidad pero no ha sido así; en un segundo necesitaba marcharme de allí, escapar sin dejar rastro, esperar a que volviera de su viaje la única persona que podría encontrarme. Pero no podía decirlo, tuve que vivir por dentro y sonreir por fuera, callarme y hacer como que nada pasaba, darla todo el apoyo que necesitaba.
Salí de casa, pensé que un teatrillo me haría reir, que me serviría para olvidar, para volver a la fantasia... desgraciadamente no fue así.

Corrí, corrí y desaparecí, no quería que me encontraran. Estaba cansada de todo, cansada de nada, cansada de necesitar a gente a mi alrededor, cansada de aire, cansada de asfixiarme, cansada del blanco y negro, cansada de los colores. Las ganas de gritar inundan mi garganta pero por más que lo intento no puedo, solo sale un insignificante hilo de voz que no sirve de nada. Deseo desaparecer y no volver ha aparecer hasta el último momento en el que todo el mundo esté en su casa y yo salga a la calle, sin que nadie se fije en mi, ser ese duende que camina por la calle sin ser visto.

{Sentada junto a ese pequeño rayito de luz que me han entregado en ese intento de volver a la fantasía}