Los impulsos...
... son aquellas cosas que la gente hace sin pensar.
Cierro los ojos y allí me espera taciturno para no ser descubierto. Se acerca sigilosamente y empieza a hablar con ese suave tono de voz capaz de penetrar en mi sin llegar a entender lo que dice. Hazlo me dice, nadie va a enterarse, y si nadie se entera no puede hacer daño. Cuando despierto esos impulsos golpean mi cabeza deseando salir con disimulo para que nadie pueda conocerlos, solo aquellos que formen parte de esos pensamientos. Tardo horas en eliminarlos de mi cabeza y a la más mínima ocasión salen a la luz buscando su propósito instintivamente.